Por primer vez en 15 años, la Reina se viste de rojo en los Princesa de Asturias

No suele fallar y este año mucho menos. Eso sí, arriesgando poco y apostando por lo que sabe que le funciona. La Reina Letizia ha vuelto a deslumbrar en su aparición en los Premios Princesa de Asturias de este año, pero siguiendo el guión de las ocasiones en las que el ámbito institucional prima sobre todo lo demás. Un vestido de corte midi, falda evasé y entallado a la cintura, en su color fetiche, el rojo. Además, por primera vez en esta ceremonia.

Echando la vista atrás, la Reina ha lucido prácticamente todos los colores posibles en estos premios, a los que lleva asistiendo desde 2004, cuando contrajo matrimonio con el Rey Felipe -solo faltó en 2005 porque estaba a punto de dar a luz a Leonor-. Azul, blanco, verde, beige, marrón, negro varias veces... Pero precisamente, el rojo, que es el color que más le favorece y del que más vestidos tiene, nunca lo había usado. Hasta este viernes 18 de octubre. Porque hoy era más especial que en los 15 años que lleva acudiendo: hoy era el estreno de su hija Leonor en los galardones que llevan su nombre.

Este 2019 ha sido el elegido por la Familia Real para que la heredera debutara en Asturias, donde se le lleva esperando varios años. Es ahora cuando los Reyes han decidido que su hija mayor está preparada para ir asumiendo su papel institucional como heredera al trono, por lo que cada vez tiene más participación en los actos relacionados con la Corona, y éste es quizá de los de más peso. Así, la familia al completo llegó el jueves a Oviedo para una edición que será inolvidable.

Porque la Princesa también va a decir unas palabras después de que lo haga su padre, por lo que la expectación es máxima. Así, doña Letizia ha querido que su hija fuera la gran protagonista y no robarle ni un segundo de atención, por lo que ha apostado por un vestido en rojo oscuro que le sentaba como un guante de manga corta, cuello de pico y falda con ligero vuelo de gasa. Llamaba la atención los detalles bordados a la cintura, un diseño clásico y estupendamente creado por su hombre de confianza, Felipe Varela.

Para darle un toque de sofisticación ha añadido al look un par de impresionantes pendientes de rubíes rojos que han llamado la atención poderosamente con su recogido bajo, el mismo peinado que lleva utilizando estos días en Asturias. El calzado, unas sandalias rojas y un bolso de mano plateado. 

Así, absolutamente impecable y teniendo claro que Leonor era hoy la prioridad, Letizia nos deja otro look para la historia de los Princesa de Asturias, quizá el acto del año que más le gusta. En su tierra, la Reina es feliz y todo son sonrisas, cariño, cercanía y estilismos memorables.